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 Tanto los billetes y monedas de prueba como los conmemorativos están en el punto de mira de muchos coleccionistas. ¿Sabes lo que son?

Los billetes y monedas de prueba (denominados en inglés como test notes, test money, funny money) se han convertido en el blanco de muchos coleccionistas. Sus diseños son frescos, diferentes y únicos. Pero, ¿para qué se emite dinero de prueba? Como su nombre indica, para poner a prueba un diseño con el objetivo de:

    • Testear el funcionamiento de cajeros automáticos

    • Testear el funcionamiento de nuevas técnicas de impresión que se renuevan y mejoran continuamente

    • Testear medidas de seguridad, campo en el que nunca se deja de investigar

Como vemos, en todos estos testeos intervienen diferentes factores e intereses y, por tanto, la emisión de este dinero puede realizarse por todas las empresas implicadas en su producción: grabadores, impresores, diseñadores, fabricantes de cajeros y bancos centrales, productores de tinta… Todos estos sectores pueden, por supuesto, trabajar en conjunto para testear diferentes actualizaciones en una misma tirada de prueba. Los primeros billetes de prueba que de los que hay constancia son de principios del siglo XIX

El dinero de prueba (monedas o billetes) se suele clasificar en los catálogos numismáticos con las letras PR o PF, en relación a la palabra ‘proof’(que significa prueba en inglés). 

 Otros usos del dinero de prueba

Más allá del objetivo genuino de comprobar la fiabilidad y resistencia de un nuevo material, diseño o tecnología, en la actualidad el potencial de los billetes de prueba va mucho más allá de la practicidad. En estos billetes se han visto eficaces objetivos de marketing y promoción  utilizando un diseño como prueba del buen hacer de una empresa.  Y es que, bien pensado, como campaña publicitaria no tiene comparación.

Así, los billetes de prueba se han convertido en un gran objetivo dentro del coleccionismo y esto ha hecho que proliferen sus usos.  En este sentido, se utilizan emisiones de monedas y billetes para conmemorar convenciones de coleccionistas, ediciones especiales de películas, series de televisión, grupos de música, eventos deportivos… Siempre se tratarán de piezas únicamente de colección y no entrarán en circulación como dinero propiamente dicho. Sus ediciones son limitadas y, como un souvenir más, pueden venir empaquetadas en cuidadas cajas de presentación. 

Este tipo de dinero conmemorativo puede adquirirse como recuerdo de un acontecimiento o lugar que hemos visitado, como elemento de adorno ya que sus diseños son memorables, como regalo (algo cada vez más extendido no solo entre particulares sino también entre empresas) o como inversión, confiando en su revalorización al cabo del tiempo.

En este apartado podemos hacer especial mención al caso las monedas de colección de euro, normalmente acuñadas en metales con un valor nominal y diseño diferente de las destinadas a la circulación. Han de diferir perceptiblemente de estas últimas en al menos dos de las siguientes características: color, peso y  diámetro y, además, no tendrán un canto perfilado con festón fino ni forma de ‘flor española’.

Sin embargo, a pesar de la proliferación de todos estos usos alternativos del dinero creado no para la circulación sino específicamente para el coleccionismo, los ejemplares de prueba siguen siendo, con mucha diferencia, los más codiciados. Y dentro del dinero de prueba, son especialmente reclamados:

    • Los prototipos: series realmente reducidas al ser primeras pruebas.

    • Series identificadas con lugares exóticos.

    • Emisiones especiales.

    • Casos raros: euros acuñados en 1999, de Catalunya, por valor de 3€… Una moneda o billete de euro en prueba es una joya muy buscada.

Monedas o billetes conmemorativos

No hay que confundir las monedas o dinero de prueba o coleccionismo (no destinado a circular) con el conmemorativo, emitido con una temática concreta y de forma limitada para conmemorar algún acontecimiento o personalidad. En la zona Euro esto se hace únicamente con las monedas de 2 euros cumpliendo ciertas condiciones, como tener una cara nacional diferente de la habitual pero manteniendo la cara común.  Sólo se permite a cada Estado miembro la emisión de dos monedas conmemorativas por año (como mucho tres si se trata de una emisión conjunta de la zona euro).

La primera moneda conmemorativa en euro emitida en España fue para celebrar el IV centenario de la primera edición del Quijote, de las que se emitieron 8 millones. La última ha sido la del quinto centenario de la vuelta al mundo (1 millón).

Fuera de la zona Euro también encontramos dinero conmemorativo. Por ejemplo, recientemente y con motivo del Mundial de Fútbol, Qatar emitió 6 millones de billetes conmemorativos de polímero, de valor real, que fueron disputados por miles de aficionados a modo de souvenir.

Como vemos, tanto el dinero de prueba como el conmemorativo son objetivo de coleccionistas. ¿Son parte de tu colección?

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Fuentes: 
http://curiosidadesnumismaticas.blogspot.com/2015/10/billetes-de-prueba.html?m=1
https://www.bde.es/bde/es/areas/billemone/Publico_general/Monedas_de_euro/conmemorativas/Monedas_conmemo_8c1abaff11bc821.html
http://currency_den.tripod.com/testnotes/printer.pdf